
La calibración en las básculas se realiza a través de un conjunto de ensayos que determinan los posibles errores de medida y las correcciones que hay que llevar a cabo. A diferencia de la verificación, la calibración puede llevarse a cabo por laboratorios no oficiales y recibe un etiquetado y un plazo de periodicidad distinto.
Aspectos generales en la calibración de básculas
Como comentábamos, la calibración de una báscula consiste en la aplicación de cargas de ensayo en el instrumento de pesaje bajo unas condiciones específicas. Con el resultado se determina el error o variación de la indicación y se evalúa la incertidumbre de medida atribuía a los resultados. Para realizar una correcta calibración hay que tener en cuenta ciertos aspectos generales.
1. Rango de calibración de la báscula
Por lo general, la calibración de la báscula se realiza del rango de pesaje completo. Por otra parte, el cliente puede solicitar el examen de cierta parte del campo de pesaje, limitando la calibración por una carga mínima y máxima o por cargas nominales individuales.
2. Lugar de calibración
La calibración debe realizarse en el lugar de uso del instrumento de pesaje. En la mayoría de las básculas, el comportamiento y los valores resultados se ven afectados si se colocan en un sitio distinto. Por lo tanto, la calibración dejaría de ser válida si se realiza en un espacio distinto al que va a estar en uso. Esto sucede por tres posibles efectos:
- La diferencia en la aceleración de la gravedad en el local.
- Las variaciones en las condiciones ambientales del espacio de trabajo.
- Distintas condiciones mecánicas y térmicas durante el transporte de la báscula.
3. Condiciones previas a la calibración
La calibración de la báscula sólo `podrá realizarse cuando se den todas las condiciones que detallamos a continuación:
- La báscula puede identificarse fácilmente.
- Todas las funciones del instrumento están libres de efectos contaminantes y funcionan correctamente.
- Los resultados que muestra no son ambiguos y pueden leerse correctamente.
- Las condiciones del lugar de uso son las adecuadas para que el instrumento pueda operar. Es decir, sin corrientes de aire, vibraciones, con estabilidad en el lugar de emplazamiento, etc.
- La báscula debe llevar encendida el tiempo necesario para estar caliente y lista para operar.
- Debe estar nivelada.
- El instrumento de pesaje no automático debe haber estado sometido a su carga máxima permitida al menos una vez.
Procedimiento en la calibración de básculas
Para que la calibración sea precisa, el usuario de la báscula debe asegurar que durante los ensayos se dan las condiciones habituales de uso de la báscula. De este modo aseguramos que los efectos perturbadores están incluidos en los valores medidos y, por tanto, en la incertidumbre obtenida.
Cuando todos los aspectos anteriores se han comprobado y las condiciones son las correctas, se procederá a la calibración de la báscula. Hasta el momento, la calibración de instrumentos de pesaje no automáticos se realiza con pesas patrón correctamente calibradas y autorizadas. Éstas servirán para realizar los ensayos sobre el receptor de carga de la báscula, teniendo en cuenta el efecto de empuje del aire y los efectos de convección que pueden afectar a las pesas.
Las cargas de ensayo se llevarán a cabo con patrones de masa trazables o por cargas de ensayos comparativos, menos usados que los primeros. Por lo general, los ensayos en la calibración se realizan para determinar la repetibilidad de los resultados, los errores de los mismos, y el efecto sobre los resultados si aplicamos la carga en un punto diferente del receptor de carga (zona donde se colocan los objetos que van a pesarse).
En AIVT Agroibérica Ingenieros Verificaciones Técnicas realizamos las verificaciones técnicas de sus instrumentos de pesaje no automáticos. Nuestra experiencia y la acreditación ENAC garantizan la calidad y seguridad de nuestros servicios y nos avalan como entidad autorizada para realizar el control metrológico legal de instrumentos de pesaje, entre otros.